Cura para la desinformación

Cada día la información se torna menos confiable y la gente confia más en los medios

Mentiras, medias verdades, deformación de los hechos, tergiversación. Este es el menú que nos sirven los medios cada día desde el desayuno hasta la merienda nocturna. A ellos se suman los crédulos que comparten y divulgan las noticias en las redes sociales y a través de mensajería instantánea.

¿Qué pasó con la prensa confiable que nos informaba sobre los hechos? Desapareció. Ya para la década de los 80 era un hecho que los periódicos pertenecían a unas pocas personas cuya opinión va por encima de cualquier consideración. Lo que era típico de la "prensa oficialista" ahora es la norma de los medios privados.

Editorialización de la noticia

Toma cualquier noticia de cualquier fuente. Calcula cuánto del texto se refiere a los hechos y cuánto es opinión del periodista o el redactor. Puede ser una relación tan desbalanceda como 95% de opinión y 5% de los hechos.

La cosa no se detiene ahí. Hay eventos reales y verificables independientemente que nunca aparecen en las "noticias". La prensa está sesgada de tal manera que trata de invisibilizar cualquier evento que no encaja en su "política editorial", o sea, las cosas que apoyan los dueños de los medios impresos, radiales y televisivos.

Línea de Defensa

Puedes defenderte de los abusos de la prensa y de la desinformación que te quiere mantener ignorante de cosas que te importan. Si confías en los periódicos que lees, las emisoras que escuchas y los canales de televisión que miras, esta solución no es para ti. Para quienes se quieren zafar de la manipulación mediática, aquí van estos consejos:

  • Recurre a la fuente primaria. Verifica si lo que dice la prensa es lo que dice la persona, grupo o institución. Es común que citen a personas fuera de contexto y que se publique frases y se omitan otras.

  • Escucha a todas las partes. Puede que un medio esté sesgado hacia un lado de la mentira y haya otro que sostenga la mentira opuesta. Busca el balance entre ambas partes y sales mejor no creyéndole a ninguna.

  • Ejerce tu derecho a la duda. El ser humano es mentiroso por naturaleza. Creer ciegamente en cualquiera es algo muy tonto.

  • Usa la teología de la sospecha. ¿Cuáles son las intenciones detrás de la publicación de esa noticia? ¿Qué ganan los medios con su divulgación? Siempre están vendiendo algo, ya sea un producto, una ideología, un candidato político o un punto de vista. De cualquier modo, tu libertad está en juego.

La prensa es reconocida como "el cuarto poder" en muchos países, pero ha abusado de ese poder usándolo de manera arbitraria y discriminatoria, ataca a grupos de ciudadanos con la pobre excusa de defender a otros. El visionario John Seibold dijo esta frase: "La libertad de prensa pertenece a quienes tienen una". Algunos pierden esa libertad a manos de tiranos, otros la pierden por sus propios actos de parcialidad.

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