Cómo funcionan los programas espías

Inadvertidamente, estos pequeños programas terminan accediendo a tu computadora, haciendo de las suyas.

Descargas un simpático salvapantallas (screensaver, en castellano), es la admiración todos los que lo ven. Todos tus amigos quieren tenerlo, así que les pasas en enlace para que lo descarguen a sus computadoras. Una vez instalado, el programita se conecta a un servidor, desde el cual comienzan a colocar publicidad en tu escritorio. Llueven las ofertas que no te interesan y te interrumpen en medio de las tareas que estás realizando.

Otras veces, cuando abres el navegador de internet, en vez de aparecer tu página de inicio, aparece otra que ni tienes idea de qué se trata. Tu navegado ha sido secuestrado, para obligarte a visitar la página del distribuidor del programa.

Es más común que lo que puedas pensar, pero la instalación de programas ocurre a diario y, no una, sino varias veces en cualquier día. Las variantes pueden ir desde los programas que generan publicidad remotamente (Adware), hasta otros que pueden comprometer tus datos personales, incluyendo información de acceso a tus cuentas de banco o tarjetas de crédito.

Los programas espías siempre tienen una intención de lucro, en ocasiones pueden generar ganancias de millones de dólares a los que los manejan, ya sea mediante fraude o pautando publicidad forzada mediante engaño.

El reino del “spam”

Cuando estás en la página web, te piden que escribas tu dirección de correo electrónico, para que te mantengas al tanto de las futuras versiones del programa. A partir de entonces, te inundan el correo con incontables mensajes que te roban el tiempo, porque no son cosas que realmente te interesan y no las solicitaste, en primer lugar. Ese es el precio que tienes que pagar por el programa “gratuito” que descargaste y, aun cuando decidas no descargarlo, si ya colocaste tus datos de correo, estarás cautivo del spam por muchos meses por venir.

Esa forma de obtener las direcciones de correo, que pueden ser miles o millones, es legal, aunque es un tanto engañosa. Además de ser utilizada por estos mercenarios publicistas, esas listas de correo se alquilan a otros, sin que ellos se hagan responsables del contenido que se distribuya a través de las mismas.

Cómo protegerte

1. No descargues programas de webs de dudosa reputación. Puedes descargar programas libres de virus y espías en nuestra sección de Sofware Gratis.
2. Si el programa es muy publicitado, digamos en blogs y otras páginas de internet, es muy probable que sea un programa espía. No es necesariamente dañino o peligroso, pero seguro será intrusivo y molestoso.
3. Si decides instalar el programa, por cualquier motivo, configura tu cortafuegos (firewall) para que no le permita acceso a la internet, cerrando el o los puertos que utiliza el programa para conectarse al servidor remoto.
4. Has una revisión periódica de tu sistema con un antivirus y un anti espías que esté al día con las últimas amenazas detectadas.

Como habrás imaginado, la misma conexión que usa el programa para comunicarse con el servidor remoto, puede ser utilizada para tener acceso a tu sistema y a tu información personal, datos de cuentas de correo y cuentas de banco y tarjetas de crédito. También pudieran utilizar tu computadora como "Zombie", o sea, como trampolín para enviar correo no deseado, o como puente para acceder a otras computadoras, sin ser detectados.